CONCURSO FOTOGRÁFICO PARA EL CARTEL DE LA SEMANA SANTA DE ÚBEDA 2021
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NOTA DE LA COFRADÍA
Hoy, día 29 de enero, tendrá lugar en Saldaña (Palencia) el funeral por el alma de D. Marcos Maeso Rienda, quien fuera primer presidente y fundador de la Cofradía Eucarística de la Santa Cena de Úbeda y número 1 de la hermanad.Nacido en enero de 1920, hijo de Jerónimo Maeso, apodado “maestro zapata” no solo por su habilidad en este mundillo, sino también porque curiosamente ser su segundo apellido, y Dolores Rienda “la guapa”, de la que no hace falta explicación del sobrenombre. Creció en Úbeda junto a sus hermanos Dolores y Jerónimo.
Su padre, el “maestro zapata”, hombre con gran devoción a Jesús Nazareno, monárquico convencido por lo que tuvo algún problema, vestía en las épocas de prohibición republicana su túnica de la hermandad y, con gran respeto y de forma clandestina, realizaba el vía-crucis, revestido con el hábito de la hermandad en su casa del Real número 2.
No era de extrañar que con vocación de servicio y con las influencias familiares cofrades fuera un hombre con profundas convicciones y amor a sus costumbres, a su Semana Santa.
Así con 34 años y con gran habilidad social, junto con un grupo de adoradores nocturnos y amigos devotos y también su hermano Jerónimo, deciden fundar la hermandad de la Santa Cena con una clara y enorme vocación de servicio social en épocas difíciles en los que existían muchos barrios deprimidos y mucha pobreza, sobre todo infantil, en una España que se recuperaba de una tremenda contienda. Úbeda no se escapaba de ello.
Su pequeño local en el que arreglaba calzado era un centro de tertulia y entretenimiento. Allí en miles de conversaciones se fue fraguando la hermandad a partir del año 1954 y con esfuerzos enormes se logro sacar adelante un proyecto que solo unos cuantos locos pensaron que podía llegar a ser una realidad.Su personalidad llevó al escultor de nuestras imágenes, Amadeo Ruiz Olmos, a inmortalizarlo como uno de los apóstoles, San Simón, cuyo busto en barro le regaló a la conclusión de la obra, busto que reproducimos en esta entrada. Su bondad y forma de ser encandilaba al personal hasta tal punto que en la obra Sefarad de Antonio Muñoz Molina, se nombra a Marcos Maeso como personaje de su novela, jugando con esta realidad y con este personaje que reconocible en la obra. Era un ser excepcional y eso no se le escapó al escritor ubetense.
Pasaron los años y Marcos Maeso abandona Úbeda para residir en la calle Barbieri de Madrid, donde nunca dejó de tener contacto con la hermandad que tanto amaba. Era fácil verle en las tertulias taurinas de la Casa de Úbeda en Madrid o incluso pronunciando el pregón de Semana Santa de la Casa de Úbeda al que asistió un nutrido número de cofrades de la hermandad.
Siempre ha estado apoyando a la gente que ha dirigido la hermandad mostrando su ánimo en todo momento mandando afectuosas cartas periódicamente, la última esta pasada navidad, y muy orgulloso de comprobar como aquel sueño de un puñado de locos sobrevive con fuerza tantos años después consolidado en la Semana Santa de Úbeda y andaluza.
Incluso el actual proyecto de la ejecución de la imagen mariana que conoció, ha sido una alegría que compartió y del que mostró su enorme alegría desde su último lugar de residencia, Saldaña, donde ha pasado los últimos días de su vida junto a Cari, su mujer, una señora en todo la extensión de la palabra que ha compartido con él muchos años. Allí pudimos visitarle hace poco tiempo, y seguía conservando su memoria intacta y su magnetismo innato.
Queremos dar las gracias a todos los que nos han dado muestras de cariño y su pésame tanto a la hermandad como a la familia.
Descansa en paz, presidente. Rezaremos una oración por el descanso de tu alma. Ya estás sentado a la mesa para toda la eternidad.