Tras largas semanas de preparación, Úbeda volvía a asomarse al gran pórtico inaugural de su Semana Santa a través de un pregón extraordinario con el que Francisco Cayola nos transportó a Tierra Santa para contarnos la Semana Santa de Úbeda desde el prisma de la Cruz y de María.
La gente se preparaba para vivir intensos días, pero no quiso el buen tiempo acompañar los ánimos cofrades y ya desde esa misma noche la lluvia se instalaba como invitada inesperada e indeseada. Entre palmas y ramas de olivo, el Domingo de Ramos amanecía nublado y la cofradía de El Borriquillo se veía obligada a suspender su desfile procesional, ya por la tarde, ante el riesgo de lluvia.
El Lunes Santo el tiempo no cambiaría y las puertas de Santa María se abrirían tímidamente sólo para asomar un rato a la Virgen de Gracia ante un pueblo deseoso de respirar incienso por las calles. Los Costaleros también suspendían su procesión para realizar un acto dentro del templo de Santa Clara.
Con una mañana más invernal que de primavera se despertaba un Martes Santo lluvioso que únicamente dio un leve respiro para que lo jóvenes de Las Lágrimas abriesen las puertas de la Trinidad para realizar su primera Estación de Penitencia ante un público expectante. Sin embargo, la amenaza de lluvia hizo adelantar la entrada su templo.
La misma lluvia que impidió que la Noche Oscura realizase su Vía Crucis por las calles de Úbeda desde la Sacra Capilla de El Salvador donde previamente los hermanos habían disfrutado de una recogida y gran Fiesta Principal. El ejercicio del Vía Crucis, cuyos textos los preparó este año Juan Ignacio Damas, fueron realizados en un ambiente de silencio y oración en el interior del templo.
Llegábamos al ecuador de la semana con un balance muy negativo en cuanto a climatología, balance que no quería mejorar. Así, tras otro intenso día de lluvia la Santa Cena también suspendía su procesión realizando un acto con los hermanos en San Nicolás de Bari. Mejor suerte tuvo El Prendimiento, que recortando su itinerario, pudo salir por las calles cercanas al Colegio Salesiano.
El Jueves Santo es de esos tres días al año que brillan más que el Sol, y si el de este año estuvo rodeado de nubes, sí que permitió en cambio que pudiésemos disfrutar de un gran día de Semana Santa con todas las cofradías en la calle y realizando recorridos completos. La iglesia de Santa María volvía a convocar a los cofrades y visitantes inundando la mañana de blancos y verdes para acompañar al Señor de la Oración en el Huerto y a Su Madre de la Esperanza.
La tarde la inauguraba la banda de La Columna subiendo el rastro para recoger al Señor de Palma Burgos, que sobre portadores volvía a salir desde San Isidoro bajo melodía de Desconsuelo. La Virgen de la Caridad le seguía por las calles de Úbeda en palio de estreno. Mientras en San Pablo, la singular centuria romana tocaba al Cristo de la Humildad que sobre talla restaurada y sin clámide sobre sus espaldas recorría las calles para celebrar el centenario de la Hermandad, acompañado de Nuestra Señora de la Fe. La tarde desembocaba en noche de luto y silencio para ver procesionar, tras varios años sorprendido por la lluvia, al Cristo de la Buena Muerte.
Mientras, en el otro lado de Úbeda, anticipando el Viernes Santo, la Hermandad franciscana de la Sentencia está vez sí podía salir para enseñar a Úbeda a la Virgen de las Penas. Precedido por un extenso cortejo el Señor Sentenciado y Su Madre realizaban estación de penitencia en Santa Clara, para después y algo sorprendidos por la lluvia –lo que les obligó a resguardarse en la Trinidad- volver a su templo de Santa Teresa.
Por su parte y a pesar de la inicial lluvia, Jesús realizaba su procesión desde la puerta de la Consolada y el Miserere volvía a sonar. Aunque la incertidumbre meteorológica le obligó a acortar su itinerario bajándose por el Real a su llegada a la Plaza. Desde Santa María, a las 10.15 horas, Jesús Caído sin manto y con cruz arbórea iniciaba su desfile al compás de la marcha Unión de Cofradías, acompañado de la Virgen de la Amargura.
Al medio día, había una cita en la Trinidad ya que el Cristo de la Expiración se disponía a recorrer las calles junto a Nuestra Señora de los Dolores. Un numeroso guión tuvo que recortar su recorrido ante los riesgos meteorológicos de un tiempo desapacible y cambiante, encerrándose en la Trinidad a su subida del Rastro. Por su parte, y casi a la vez, Las Angustias también decidía procesionar a pesar del tiempo recorriendo un itinerario novedoso, aunque se vio avocada a encerrarse en San Isidoro en vez de en Santa María ante las malas previsiones meteorológicas.
La tarde nos dejaba una Procesión General suspendida con buen criterio ante el importante riesgo de lluvia –luego consumado- que se avecinaba por la noche. No obstante, la Soledad pudo volver a subir la Cuesta de la Merced para llegar a Santa María. El Santo Entierro también se disponía a realizar su procesión pero la lluvia le sorprendió en su salida, decidiendo suspender la procesión y realizar la estación de penitencia dentro del templo acompañado de autoridades, representantes cofrades, numerosos cofrades y demás fieles; mientras la Soledad regresaba a su templo de San Millán.
Tras un Sábado Santo de sol y recogimiento, de silencio y oración en torno al sepulcro de Jesús, de balance de los días vividos, los cofrades se preparaban para celebrar la Vigilia Pascual. No obstante, al día siguiente Domingo de Resurrección la lluvia volvió a irrumpir con fuerza, al igual que en casi toda la semana, impidiendo que Jesús Resucitado y Nuestra Señora de la Paz pudieran realizar su procesión. La cofradía del Santísimo también tuvo que realizar su desfile en el interior de El Salvador.
Por tanto un año 2013 marcado por la lluvia y la adversa climatología que deslució gran parte de los desfiles e impidió a 7 cofradías realizar sus procesiones. A pesar de ello, la Semana Santa consiguió imponerse a la lluvia y nos permitió saborear grandes e históricos momentos junto a nuestras cofradías.
Ha llegado el día: Jesús ha resucitado. Con Él todo renace, y a pesar de las dificultades que encontramos en nuestro camino, la vida cobra un sentido renovado en un día como hoy.
"Acepta que Jesús Resucitado entre en tu vida, acógelo como amigo, con confianza: ¡Él es la vida! Si hasta ahora has estado lejos de él, da un pequeño paso, te acogerá con los brazos abiertos. Si eres indiferente, acepta arriesgar: no quedarás decepcionado", afirmó el Papa en la Vigilia Pascual.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
La Junta Rectora de Hermanos Mayores en su tradicional reunión de la tarde de Viernes Santo, ha acordado dadas las adversas circunstancias meteorológicas, suspender la Magna Procesión General 2013.
Los desfiles procesionales de las cofradías de la Soledad y del Santo Entierro mantienen sus horarios e itenerarios respectivos, siempre que la meteorologia lo permita.
El pasado Sábado de Pasión la parroquia de Santa Teresa se llenó de alegría, se llenó de juventud.
Un año más el Grupo Joven de la Hermandad se reunió para celebrar su ofrenda floral a María Santísima de las Penas. Fue un acto muy emotivo lleno de alegría, felicidad y optimismo gracias a nuestros jóvenes.
El acto, realizado por la Vocalía de Juventud y Vocalía de Cultos, estuvo compuesto por procesión de entrada, peticiones, lectura de un cuento, ofrenda floral, rezo del Padrenuestro, imposición de medallas, palabras del párroco y bendición final. Este año el regalo para los "peques" fue una pulsera de la Hermandad y unos libritos-comic cedidos por nuestras Clarisas con la vida de San Francisco de Asís y Santa Clara.
Al finalizar el acto se hicieron una fotografía todos juntos entre los dos pasos. Se comprobó de primera mano que esta hermandad tiene futuro.
NOTA DE PRENSA DE LA COFRADÍA.
A las 17:00 horas, conforme circular enviada, nos dábamos cita los hermanos en el patio del colegio de la Santísima Trinidad; comenzando la lluvia a hacer acto de presencia con intensidad progresiva. Cuando nuestra banda de cabecera bajaba con los toques de ligero la lluvia se cebó con ellos mojando sus trajes de estatutos y galas, aunque afortunadamente no se provocaron daños, dada la rápida entrada al templo realizada.
La lluvia se intensificaba conforme se acercaba la hora de salida, si bien pocos minutos antes de las 18:00 horas comenzaba a disminuir hasta prácticamente desparecer la lluvia.
Conforme el protocolo programado, se procedió a la celebración de Junta de Gobierno Extraordinaria en el interior de la Sacristía del templo. Se procedió al estudio de los distintos partes meteorológicos, así como se contactó con el Centro Meteorológico de Andalucía Oriental donde los técnicos nos explicaron lo inestable de la meteorología y el posible riesgo de ocurrencia de chubascos.
Ante la posible ocurrencia de lluvias con el consecuente daño al patrimonio de la cofradía, especialmente el trono del Titular en fase de restauración, así como los posibles daños que ocurrieran sobre hábitos penitenciales de los hermanos, la Junta de Gobierno, conteniendo la emoción, de forma colegiada, optó por aplicar el protocolo de suspensión de desfile penitencial.
Atendiendo a los protocolos programados, tras la decisión de la Junta de Gobierno, se informó a los hermanos que entraran al templo para comunicarles la decisión, se comunicó la decisión a la Unión de Cofradías para que se hiciese pública, así como se indicó mediante anuncio en la puerta del templo.
Una vez todos en el interior del templo, el Hermano Mayor daba lectura al protocolo establecido.
Asimismo el Hermano Mayor invitó a los medios de comunicación, y diversos amigos reporteros, a participar en el acto programado, si bien no estaría permitida la grabación de imágenes o fotografías, para lo cual podrían dejar sus cámaras depositadas en la Sacristía. A este respecto esta decisión se amparaba en el hecho de que el acto a celebrar era íntimo, en familia, en una situación donde existen emociones y sensaciones entres hermanos, que consideramos no deben utilizarse en los medios de forma noticiosa, aún menos cuando en nuestra cofradía existe una gran cantidad de menores de edad, que requerían nuestra atención y respeto en momentos que se tornan difíciles para todos. A este respecto, el Hermano Mayor recalca su agradecimiento por la comprensión y respeto por parte de los medios y reporteros que comprenden esta situación.
Una vez realizada la comunicación dio comienzo el acto procesional en el interior del templo que se estructuró según protocolo establecido.
Finalización de la estación de penitencia y convivencia en el patio del colegio de la Stma. Trinidad.
Conforme lo previsto se abrieron las puertas del templo a las 20:00 horas, cuyo cierre estaba previsto a las 20:30, si bien se alargó en el tiempo dada la congregación de fieles que querían visitar a Nuestros Titulares; por lo que por tal motivo se mantuvieron las puertas del templo abiertas hasta que se agotó la presencia de fieles que aguardaban para visitar a los Titulares. Durante la visita de fieles al templo, la Cofradía repartió entre los mismos distintas estampas de recuerdo, con alegoría en el anverso sobre el "Año de la Fe".
De esta forma finalizaba un Domingo de Ramos, especial, en el que, si bien no pudimos disfrutar de nuestra estación de penitencia por las calles de Úbeda, si pudimos convivir en hermandad, en ambiente de oración y recogimiento, que sin duda alguna ha constituido un hecho favorable en el seno de nuestra Cofradía en cuando a demostración de Fe, de hermandad, de cofradía y de respeto a Nuestros Titulares.
En otro orden de cosas, el Hermano Mayor, en nombre de la Cofradía expresa sus disculpas por aquellos detalles que no pudieran haber sido atendidos, dadas las especiales circunstancias que acarrean una suspensión de salida procesional, quedando abiertos a todas aquellas críticas constructivas cuya finalidad sea la mejora del desarrollo de nuestro desfile penitencial y actos de culto.
NOTA DE PRENSA DE LA COFRADÍA.